El otro día leíamos el libro de El barco de Vapor ¡Puag, menuda mascota! que nos tocó en un sorteo que hizo Mamá y las Redes Sociales y, al final, os decía que íbamos a intentar hacernos nuestra propia mascota al estilo de Puag 😛 Porque, a medida que leíamos la historia me iba imaginando a Puag como el blandiblú de mi infancia. ¿Os acordáis de él? Realmente asqueroso y viscoso pero de lo más divertido. ¡¡Mi madre no nos lo compraba porque le daba un asco horroroso!! Pero al final cedió, jejejeje.
El caso es que ahora es difícil de encontrar y me puse a buscar por el mundo 2.0 a ver si existía la posibilidad de hacerlo nosotros en casa y si era fácil.
¡¡Qué sorpresa me llevé cuando vi lo sencillo que era tener blandiblú!! y muy rápido de hacer sin tener que esperar mucho.
Hay muchas recetas en varios blogs pero al final me decanté por la de Tigriteando ya que no era tóxico y, aunque mis hijos ya no son de los que se llevan todo a la boca y entienden que si es peligroso no hay que hacerlo, más vale prevenir que luego curar. La pega es que es más difícil variar en colores 🙁
Ingredientes para el Blandiblú no tóxico
Para hacer este blandiblú (también recibe el nombre de flubber o slime) sólo se necesitan 2 ingredientes obligatorios y un tercero opcional:
- 3 sobres de plantago
- 1 vaso de agua
- colorante
Modo de hacer
En un recipiente alto, apto para microondas, echamos los 3 sobres de plantago y el vaso de agua. Nos quedará una mezcla color naranja que podemos variar añadiéndole colorante. Nosotros lo dejamos con el color original.
Batimos muy bien para que no queden grumos y lo ponemos 5 minutos en el microondas.
Después lo dejamos enfriar, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera para despegarlo de las paredes del recipiente.
Con un poco de cuidado los peques pueden hacerse su Puag y pasar horas jugando. Luego, si lo guardamos en un recipiente bien cerrado, aguantará más tiempo sin secarse.
Inconvenientes del blandiblú casero:
sobre todo el olor que deja el plantago, a mi hija le molesta tanto que sólo aguanta un poquito jugando 🙁 Eso sí, está deseando hacer más de otros colores y guardarlos en frascos 😛 ¡¡Estos niños!!
Qué asquerosidad!! Jajajaja, a mi de pequeña no me dejaron tener blandiblu… Sniffff
De milagro lo tuve yo, es más, el otro día le dije a mi madre que lo había hecho y me dijo que no fuera a su casa con ello 😛
Oye, pues lo anoto! para jugar con los basurillas del peque!! lo que disfrutábamos en nuestra época con ese moco!! jajaja
Ya te digo… qué buenos recuerdos!!!!! es un juego que apetece compartir con los hijos 😛
ayy que suerte tengo, a mi hijo le da un ascazo tremendo jaja, no consiente tocar nada que sea de ese estilo así que gracias por la receta..pero de esta me libro 😉
me pasó con el mayor y la plastilina.. no soportaba tocarla y la arena ni te cuento… ahora juega con blandiblú pero lo justito… la pequeña es la que más lo está disfrutando… así que … te entiendo 😛
Pero el blandiblu también olía fuerte¿no?
Jejeje ¡Qué recuerdos!
La verdad… ¡¡del olor no me acuerdo!! jejejeje… pero mi hija sí que se ha quejado de que huele raro 😉 no se… habría que preguntarlo a ver quién se acuerda 😛
Hola:
Menos mal que te he encontrado. Es el tercer intento por hacer blandiblú. Nos ha salido, ¡por fin! pero también se ha desparramado bastante por el micro. Se cuela por cualquier agujerito. Lo hemos puesto en un recipiente alto pero ha subido hasta arriba. ¿Asics idea para evitarlo?
Gracias
Ostras, eso no nos había pasado a nosotras. No sabría qué decirte. Lo siento