Querido Diario
hoy vengo a dejar a un lado toda la culpa que me embarga para dar paso a otros sentimientos más positivos. Creo que si no consigo echar fuera de mi parte de ella será imposible seguir hacia delante.
¿Y cuál es esa culpa que no me deja avanzar?
Mi mayor culpa y la que más me corroe y que debo desterrar es la de no preguntar por mi hijo cuando nació. Después de la cesárea del mayor, me olvidé de preguntar por él durante un tiempo. Me llevaron a reanimación y me estuvieron dando conversación para que la espera no se me hiciera larga y… ¡¡tanto me entretuvieron que no pregunté por mi hijo hasta pasado un buen rato!!. Me di cuenta que mi bebé no estaba a mi lado y quería saber dónde se encontraba.
Fue ahí cuando mi corazón se encogió y se lleno de este sentimiento de culpa que muchas veces me hace pensar que mi relación con mi mayor no es tan buena como quisiera porque me olvidé de él. Fui una #malamadre, me vi como la peor del mundo y, aunque ahora creo que ese lapsus fue más por las hormonas, necesito soltarlo para expiar mi culpa.
Esta vez no llego tarde a la edición de #QueridoDiario del mes de Octubre, un carnaval bloguero ideado por The Blue Monster, en el cual, se nos propone cada mes una palabra (para este año ha elegido los sentimientos) y debemos de hablar de ella como si escribiéramos en un diario. Dos normas a seguir: iniciar el escrito con un Querido Diario y que no ocupe más de 200 palabras.
¿Os animáis a participar? La palabra de Octubre, culpa, aún está en marcha (en este enlace podéis leer otros diarios y apuntaros) o si no, esperar a la de Noviembre, ya veréis como os engancháis una vez que probéis.
Pero si no os animáis a hacerlo en la red y preferís el clásico diario de papel también podéis dejaros llevar con el libro #QueridoDiario que podéis comprar pinchando encima del título.
Nos vemos pronto.
Mis otras participaciones en este 2015:
Creo que a todas nos instalan un programa de culpabilidad cuando nos convertimos en madres. Yo me siento culpable demasiado a menudo por demasiadas cosas!!
No te martirices con eso, después de pasar una cesárea te digo que las condiciones después son muy malas, no se está ni al 1%.
NO SOMOS CULPABLES (me lo repito cual mantra, a ver si así lo aparco de una vez, jeje).
Feliz día!!!
Te voy a copiar el mantra a ver si así vivo más feliz porque con eso del sentimiento de culpabilidad terminamos malcriando a los niños compensándolos con cosas materiales más que con cariño y tiempo 😉
Holaaaa!! Yo no te veo mala madre, no se que es cesarea xqe tuve parto natural pero imagino que muchos sentimientos deben estar aflorando después de tal intervención y a ti te pasó eso, simplemente y lo veo normal es que quisieras salir ya de ahí para estar junto a tu bebé pero sentimiebto de culpa nada mujer 😉 un beso
Sí, eso me costó verlo pero es tan fácil con la maternidad (y paternidad) que el sentimiento de culpa nos persiga…