Ya estamos de vuelta de nuestras bien merecidas vacaciones de Navidad en las que, descansar hemos descansado relativamente poco pero es que disfrutando de la familia no parece que una se canse nunca.
Como todos los años, nosotros fuimos al norte a casa de mis padres. Imaginaros en un piso de alrededor de 70 metros cuadrados metidos a seis adultos y tres niños… ¡¡¡frío no hemos pasado!!! 😛
Tampoco es que lo haya hecho, es cierto, estas navidades, climatológicamente hablando, han sido muy raras y prácticamente hasta el último día no hemos visto la lluvia ni el frío.
¿Qué es lo que hemos hecho?
Estos días de vacaciones vimos al Olentzero (en la entrada de Tradiciones Navideñas os lo conté) y mi hija estaba como loca por acercarse a decirle hola y que viera que estábamos allí no fuera a ser que esa noche fuera a Alicante a dejarles los regalos (este Olentzero llega a todos los puntos del mundo donde haya vascos 😉 ) y se encontrara la casa vacía.
La mañana de Navidad fue una locura total pero llega de emoción. La primera en levantarse fue mi pequeña y no os podéis imaginar la manera de gritar cuando llegó al salón y lo vio lleno de regalos. Claro, levantó al resto de la casa con tanto alboroto y los nervios por averiguar de quién era cada regalo se notaban en los tres niños.
Aprovechando que mi mayor ya sabe leer, le encargamos que fuera leyendo el nombre de cada paquete. La Patrulla Canina para mi sobrino (todos los personajes y el centro de mando) además de una mochila que llevaba dentro una sorpresa ¡¡un cuento personalizado en el que él era el protagonista!! A mi hijo le dejó dos juegos de mesa, Operando y Rummy, un balón de fútbol (más bien ese era para los tres porque cada vez que bajan al parque se pasan el tiempo chutando) y ¡¡¡la Tablet Clan!!! atacado de los nervios cuando la vio y es que era uno de sus regalos favoritos y no estaba muy seguro de recibirlo. La pequeña recibió lo que había pedido en su carta, dos princesas Disney (Cenicienta y Aurora), un My Little Pony plastilina, la Casita de Cuentos de Pin y Pon y un set de cocina de madera (estamos en una etapa muy rosa, pero que muy rosa y se nota en sus preferencias).
Para los mayores también hubo regalos. ¿Recordáis que os dije que había encargado unos regalos personalizados? ya os puedo desvelar que el abuelo recibió uno de ellos, una taza para “el mejor abuelo del mundo mundial”, el cuento personalizado para mi sobrino (antes os lo he mencionado) y el calendario con fotos de los nietos para la abuela. Como ya presagié les encantó.
¿Y a mí me trajeron algo? Bueno, no se leyeron mi lista de deseos pero algo me trajeron… redoble de tambores… ¡¡un paño de cocina!! jejejejejeje… el detalle es lo que importa y siempre viene bien tener uno nuevo y además de uno de los colores que más me gustan 😛
Durante las vacaciones también aprovechamos a ir a pasar el día al PIN (Parque Infantil de Navidad) de Bilbao en el Bilbao Exhibition Centre y nos lo pasamos en grande montando en las atracciones (que las había para todas las edades) y realizando talleres. A última hora nos dolían todas las fibras del cuerpo y los niños cayeron rendidos en cuanto entraron en el coche. El barco pirata fue la atracción estrella del día junto con el tren dragón.
Y, siguiendo con nuestras tradiciones navideñas, el último día del año fuimos a ver la San Silvestre de mi pueblo. No es una supermegafamosa San Silvestre pero vienen algunas figuras a correrla, sobre todo de Kenia y Marruecos y, para mi sorpresa, este año acudieron dos atletas madrileños para darle aún más diversidad al conjunto de corredores. Eso sí, no puedo olvidarme de mencionar a todos los participantes del pueblo que, como casi todos los años, lo dan todo en la última carrera del año, para mí son unos valientes porque yo sería incapaz de dar siquiera una vuelta.
Además de estas salidas, aproveché las vacaciones para ver a mis amigas (no todas porque fue imposible pero espero que a la próxima sí pueda ser), nos recorrimos casi todos los parques del pueblo (y os puedo asegurar que hay muchos) y me traje a casa una invitación para una boda ¡¡¡ya tengo que empezar a buscar modelito!!! 😛 Además de un regalito muy personal, que nos hizo una amiga a mi hija y a mí ¡¡es toda una artista!!
Pero aún nos queda el día de Reyes, no creáis que me he olvidado, pero eso os lo contaré otro día.
¡¡¡Feliz año!!!
Qué vacaciones tan completitas! No habéis parado 😉
Feliz día
Sí, hemos aprovechado bien el tiempo 😉
Qué bien que hayáis disfrutado en familia. Feliz año!
Sí, ha estado genial y se va notando que los niños se hacen mayores y cada vez lo pasamos mejor 😛
No me extraña que no hayas descansado, ¡qué de cosas habéis hecho! Mi Peque también tiene 3 años y también se nota cómo está viviendo las Navidades este año.
¡Feliz 2016!
Sí, creo que a partir de esa edad es cuando empiezan a vivir plenamente la magia de estas fechas… mi sobrino es que alucinaba con todo y los mayores (mis hijos) dándoselas de listos porque ya sabían de qué iba todo… más graciosos…
Un paño de cocina? Te has divorciado ya? jajajaj.
Oye habéis aprovechado un montón estos días, ahora a trabajar, zanganas! 😉
Sigo casadísima porque el trapo de cocina fue regalo de mi madre jajajajajaja, mi querido maridín, para no perder la costumbre, no me ha regalado nada!!!!
Sí, esta semana todavía estamos un poco off pero a partir del lunes a tope otra vez 😉