Como os conté en mi último desahogo, no pienso callarme. Y no pienso hacerlo hasta conseguir que se solucione el problema de mi amiga. Porque no quiero tener que llorar. Muchas familias y amig@s de todas esas mujeres que han muerto a manos de sus parejas y/o ex-parejas ya lo hacen. No quiero tener que hacerlo yo. Ni nadie más. Se que estoy lejos pero haré todo lo posible para que alguien haga caso a mi amiga y podamos acabar con este acoso. Voy a dejar de tener miedo e intentar dar visibilidad a lo que sufren muchas mujeres en silencio.
Porque, por desgracia, son muchas las mujeres que están en la misma situación que mi amiga. Lo se porque, a raíz del anterior post, nos habéis escrito muchas contando vuestros casos. No puedo contarlos aquí, porque son privados, pero no dejaremos de hablar de ello.
¿Cómo están siendo estas fiestas para mi amiga?
Un tormento. Continuas llamadas y reproches mientras ella ha tenido al niño en casa. Llamadas perdidas, de uno o dos toques, para que figure de cara al juez que es un padrazo y está constantemente preocupado por su hijo y luego mails dónde recrimina a mi amiga que no le deja hablar con él. Que es el padre y tiene derecho a hacerlo.
Nuevos intentos de robar las claves de acceso a las redes sociales de ella y a sus cuentas de correo electrónico. ¿Para qué? Para poder borrar las pruebas del acoso y derribo al que tiene sometida a mi amiga. Esos mails donde mete la pata y queda como lo que es, un maldito acosador y maltratador que no quiere dejar que mi amiga rehaga su vida.
Ahora el niño está con él. Se supone que mi amiga tendría un respiro. Se supone. Pero no ha sido así. Lejos de conformarse con ello, ahora también quiere controlar las claves de correo electrónico de la pareja de mi amiga. En vez de estar disfrutando de su hijo y de las fiestas, él continua con el acoso y va un paso más allá, atacando a terceras personas.
Sí, ya está denunciado, pero, de verdad ¿cuántas creéis que la policía podrá hacer algo?
Mi miedo a terminar llorando
Por dos razones:
La primera
Me levanto por la mañana y las noticias que veo son muy desalentadoras. Diana Quer ha aparecido y, supuestamente, murió por decir NO a un hombre que se creía con derecho sobre ella. Lo mismito que el ex-marido de mi amiga. Se cree el dueño y señor de ella y no soporta el hecho de que ella agarrara sus cosas y se fuera. Que ella tomara la decisión porque… echarles, les había echado muchas veces, a los dos, madre e hijo. Y se habían ido, pero siempre habían vuelto de nuevo. Por el niño. Siempre por la misma razón. Por no separar al padre de su hijo. Sin importarle a mi amiga su bienestar mental y físico.
La segunda
Por otro lado, desaparecieron dos niños, secuestrados por su padre. Durante una de sus estancias. Llegó el día de entregárselos a su madre y… no aparecieron. Un hombre, con antecedentes y una sentencia en firme, que tiene derecho a visitar a sus hijos. Vale, pero la suficiente mala leche como para hacer daño a la ex-mujer a través de ellos. Con un acto tan sencillo como llevándoselos y no decir dónde están. Menos mal que esta vez todo ha terminado bien y los niños ya han vuelto con su madre y están en perfecto estado. Pero no siempre ha sido así.
¿Podría pasarle a mi amiga?
Por desgracia, lo veo más que posible. Le veo capaz de hacerlo. Es más… ¡¡Si ya casi lo hizo el año pasado cuando se lo llevó del colegio sin previo aviso!!
Y nadie hizo nada. Nadie tomó medidas cuando ella fue a denunciarlo. Ni siquiera la jueza que lleva el asunto de la custodia lo tuvo en cuenta. Mi amiga sólo tuvo derecho a una pataleta y a tener que cambiar todos sus planes porque él se salió con la suya.
Ha pedido ayuda y todos le dicen lo mismo ¿has denunciado? Sí, he denunciado todo lo relacionado con su hijo. Ha denunciado que el niño haya llegado a casa diciendo que el padre insulta a la madre delante de él y que esté diciéndole continuamente que la familia está rota por culpa de ella. Que es una zorra y una puta. Y no le han hecho caso.
Ha llamado a asociaciones que dicen estar abiertas las 24 horas del día y que no le contestaran el teléfono. Varias veces en el mismo día. Y me ha llamado diciendo que así cómo se van a atrever las mujeres denunciar si se sienten solas e incomprendidas.
Se siente sola e indefensa. Ya no sabe qué hacer para que cese el acoso. Para que pueda hacer una vida normal con su hijo. Por supuesto, ella no quiere negarle ningún derecho como padre (que desde mi punto de vista no se merece, pero eso ya os lo contaré otro día) pero sí que salga de su vida. Y yo…
Qué duro! Pero te entiendo!
Es muy jodido que en muchas ocasiones solo queda esperar a que todo termine bien sin ninguna desgracia. Y es q así no se puede vivir, con el miedo constante. Una mierda. Mucha fuerza xa ti y par tu amiga en especial.
Muchas gracias por tus palabras. Le haré llegar tu fuerza
No me extraña que tengas miedo de acabar llorando. Estas situaciones crean mucha impotencia por no poder hacer más, por verte sola. Ella por suerte tiene a sus amigas, pero nunca es suficiente si las autoridades no intervienen. Y eso como se consigue? Cuando haga alguna gorda?. Y siento pena por tu amiga, mucha, pero por su hijo también. Ningún niño se merece ver sometida a su madre sometida a esta situación