Al cambiar de año no me planteé ningún propósito. Es el primer año que pensé en dejarme llevar (como veis otros años sí que hice listado de buenos propósitos). Pero las circunstancias han hecho que, sin quererlo ni beberlo, tenga que marcarme un par de objetivos que siempre me los planteo pero nunca cumplo. Toca cambio de hábitos ya y… ¡¡yo puedo con ello!!
¿Qué cambio de hábitos me he planteado?
El primerísimo de todos es ser positiva y pensar que esta vez sí que puedo.
En otras ocasiones ya me iba poniendo excusas antes de empezar a realizar los cambios y eso no era buen síntoma. Esta vez tengo un pensamiento positivo y una imagen en la puerta del frigorífico recordándome que ¡¡yo puedo!!
Perder peso
Bueno, más que perder peso (que me hace mucha falta) lo que quiero es ponerme en forma. Si estoy más activa y más en forma la pérdida de peso vendrá con ello. Simplemente porque gastaré más kilocalorías en mi día a día. Reconozco que cada vez estaba más sedentaria y que en cuanto hacía un esfuerzo de más me costaba y… no me gustaba nada.
Ahora ando una hora tres veces por semana, mientras mis hijos entrenan. Además, subo y bajo las escaleras. Adiós al ascensor. Y los fines de semana buscamos actividades que impliquen estar en movimiento 😛
Comer sano
Mi gran perdición siempre ha sido la comida. Soy golosa y el chocolate me pierde. Y el pan… está bien comer un poco pero es que lo mío era gula con este alimento. Por ello he desterrado de mi menú todos esos productos cargados de muchas kilocalorías y poco alimento y me he hecho amiga de la fruta (que me encanta de siempre) y la verdura. Sin olvidarme de las proteínas y algunos hidratos de carbono.
Dejar vicios insanos
Hace tiempo que debería de haberlo hecho pero, como he dicho más arriba, siempre encontraba excusas para no hacerlo. Ahora sí que sí estoy dispuesta a ello y esa creo que es el mejor comienzo para conseguirlo
¿A qué vienen todos esto de hacer un cambio de hábitos?
Porque me he dado cuenta de que si sigo así no estaré mucho tiempo con mi familia. Estoy en una edad en la que me siento joven pero el cuerpo, por dentro, lo nota. Lees y escuchas las estadísticas y ya estoy en esa edad que siempre aparecen como de riesgo para diferentes patologías. No quiero entrar en ellas y puede que no sea tarde.
Además, puede que tenga que pasar por quirófano y quiero ir lo mejor posible para evitar complicaciones en lo que puede ser ya una operación complicada.
Y porque el cambio de hábitos a otros mejores hará que mis hijos sigan mi ejemplo y los adquieran también, evitándose así muchos problemas en su futuro.
¿Os habéis planteado hacer un cambio de hábitos en vuestra vida?
Ánimo en ello. Seguro que lo logras y desde aquí te apoyaremos.
Un besote
Muchísimas gracias 😉
Seguro que puedes, solo por los motivos que das, merece la pena. Mucho ánimo.
Gracias. Los ánimos siempre son bienvenidos 😉