Comienza una nueva semana y en Cuestión de Madres estamos de estreno. Nos gusta pensar que nuestro pequeño blog es un lugar para hablar de todo lo que nos atañe en la maternidad, pero también un rinconcito para el desahogo y, como no, una puerta abierta para quién quiera decir algo y necesite un sitio. Y, fue hablando de esto, que una mamá del colegio me dijo que se animaba a participar, el tema escogido, el apego.
Mara, es psicóloga (por ahora en paro pero esperemos que sea por poco tiempo) y mamá de un niño de 5 años. Su trayectoria y currículum podréis verlo en su Facebook pero yo os voy a presentar a la persona. Enérgica y espiritual es lo primero que descubres en ella cuando la conoces. Siempre con una sonrisa en la cara, procura levantar el ánimo a los de su alrededor y lo consigue porque es pura vitalidad y energía positiva. Además, muy dulce y cariñosa desde el minuto uno, en que nos conocimos a la puerta del colegio, nos hemos hecho muy buenas amigas y es que es muy fácil quererla. (Y no es peloteo que de verdad pienso todo esto de ella).
Y, como no me quiero enrollar más porque la protagonista de hoy es Mara y lo que nos tiene que contar os dejo con su primera colaboración, ya que la tendremos por aquí una vez al mes a partir de hoy. 😉
EL APEGO. EL CAMINO HACIA LA LIBERTAD.
Esta mañana he leído esta frase en un artículo “El apego es necesario para poder ser independiente el día de mañana” y he estado reflexionando sobre ello. En principio podría parecer contradictorio. La palabra “apego” lleva connotaciones de dependencia ¿cómo puede ser necesario para ser independiente?
El apego es el vínculo afectivo, una relación especial que se establece en la primera infancia principalmente con la madre pero también con otros familiares como el padre (actualmente muy implicado en el cuidado del niño). Posteriormente el ser humano establece este tipo de vínculos también con su pareja e hijos. Son relaciones íntimas y profundas, sin embargo la que me ha hecho reflexionar es la primera, el apego madre-hijo.
Cuando se establece este vínculo (el momento en el que se establece con mamá creo que sería otro tema para hablarlo) el bebé siente seguridad, tranquilidad, consuelo,…y seguramente muchas cosas más. Si el vínculo no se produce como es el caso de niños abandonados por sus progenitores en las primeras semanas y meses de vida; niños que no reciben los cuidados fisiológicos vitales (alimentación, higiene,…) a éstos niños le va a faltar seguridad y es algo que marca de forma importante una personalidad insegura. Sin embargo no es necesario ver casos tan sangrantes, también se producen vínculos frágiles cuando la madre apenas mantiene contacto piel con piel con el bebé, no hay juego con él (recordar que el juego es la principal herramienta de un niño para aprender), no se miran o sonríen madre-hijo,…
El bebé que se siente angustiado y encuentra la seguridad en la madre, es probable que sea un niño que cuando se sienta ansioso recurra a la madre o padre para recibir consuelo y ayuda y es también muy probable que sea un adolescente que cuando sienta la duda y el miedo recurra de nuevo a sus padres porque confía en ellos, porque sabe que a través de ellos encontrará la ayuda para resolver sus problemas.
La seguridad que da un vínculo estable en la infancia ofrece al niño seguridad en sí mismo, autoestima, la capacidad de SER UNO MISMO y aquí cobra sentido lo de que el AMOR NOS HACE LIBRES.
Muy buen post, hola Mara 😉
Me ha gustado mucho leer este post! 🙂
Yo creo que el problema que existe hoy en día es que se asocian determinadas cosas al apego que no son indispensables como la lactancia, el colecho… El apego va más allá de eso y se puede dar sin esas condiciones. El otro día, mi matrona (en los cursos de hipopresivos) estaba hablando conmigo y apareció la pediatra de mis peques y las dos me comentaban lo sonriente q era mi bebé y que era impresionante que nunca llorase con gente que no conoce cdo yo estoy presente. La pediatra me dijo que era un bebé seguro, que sabe que no pasa nada si yo estoy cerca. Y es cierto, se puede ir a los brazos de cualquiera pero no protesta porque sabe que estamos todo el día juntos. No protesta ni ha llorado nunca por dejarle en la cuna por las noches. Supongo q porque por el dia estamos todo el día juntos, le hablo… En fin, hay muchas formas de expresar ese cariño y amor que necesitan q no son las que hoy en día se asocian a la maternidad con apego!
En primer lugar agradecer la presentación de Maite de Cuestión de Madres pues me ha presentado y descrito con muchísimo cariño. Me ha llegado al corazón sus palabras. GRACIAS.
Hola Marta, Mama Blogger y Nosoyunadramamama. Gracias por vuestros comentarios que alimentan el blog y motivan mi colaboración. La última entrada hacía referencia a las cosas que se asocian al apego como la lactancia, ¿son cosas indispensables? ¿indispensable la lactancia y el colecho para el apego seguro? mi respuesta es NO. No lo son si tu bebé y tú podeis conseguir el contacto piel con piel de otras formas…mirarse a los ojos, besar, abrazar, jugar…lo fundamental es que tu bebé se sienta amado y protegido. Son cosas sencillas y que parecen obvias pero en ocasiones la rutina diaria, el estrés de trabajar fuera de casa, los problemas de pareja y un largo etc, hace que no se produzcan esos pequeños contactos entre madre-hijo y ahí es cuando el vínculo puede debilitarse.
Un agradecimiento también desde el corazón a todas las madres y lectores del BLOG de Cuestión de Madres, que leen a diario los post sin comentar y que ESTAN.
Me siento feliz de ser una más entre vosotras.
Lo que yo me pregunto es: existe una crianza sin apego? Quiero decir, la palabra apego y crianza deberían ir de la mano siempre, no? Me ha gustado mucho tu post Mara, un placer leerte! Besos
Hola Marifififi, aunque parezca sorprendente, así es, hay crianza sin apego, se puede criar y establecer una vinculación afectiva realmente pobre o débil. Muchas gracias, para mí también es un placer que hablemos sobre estos temas pues no solo doy, recibo mucho de vosotras. Besos para tí también.
Precisamente, quienes critican toda la teoría de la crianza con apego, suelen arremeter diciendo que estamos criando a niños más dependientes, enmadrados y que no serán autosuficientes nunca. Entiendo que a veces la lactancia, el colecho, el porteo, etc. se puedan mezclar y confundir con este tipo de crianza, porque a fin de cuentas son instrumentos que la facilitan.
Hola Planeando ser padres. Es cierto que se arremete mucho contra la crianza con apego atendiendo justamente a esto que comentas: “enmadrarse”…pero ¿qué es esto de enmadrarse?
Criar niños dependientes no sucede por la vinculación sana y fuerte entre madre-hijo, esto sucede cuando la madre tiene “heridas” del pasado, se aferra a su bebé como posible “salvación” y sólo se siente realizada a través de la maternidad y con sus actos y actitudes creará una dependencia y un sentimiento de culpabilidad en los hijos cuando éstos empiecen a mirar hacia otro lado…el apego, el vínculo madre-hijo en sí, no tiene esos efectos, todo lo contrario, el hijo se siente seguro y protegido, capaz de empezar a mirar la vida desde nuestros “brazos”.
Pues evidentemente me ha encantado y estoy totalmente de acuerdo, de hecho es mi idea de crianza y aunque a veces me critican, creo que mis hijos, por lo menos el mayor que es al que más se le nota, esbun niño bastante seguro de sí mismo.
Hola Diana. Gracias