Hace unas semanas fui a otra de las charlas que ofrece el Liceo Francés de Alicante dentro de su Escuela de Padres. En esta ocasión, la ponente no era otra que una de las autoras del blog Pintando una Mamá, Lourdes Picó.
Estuvo genial. Nos reímos, lloramos (puso un video que nos sacó las lágrimas a casi todas las que estábamos allí) y aprendimos que ser padres es toda una aventura y que no todo es como nos lo contaron.
Seguro que para los que ya sois padres y madres no es ninguna novedad eso de que tener hijos no es como nos lo contaron pero no está de más hacer un breve resumen de la charla de Lou para los que están a punto de serlo o están pensando en ello.
1- Se puede seguir con las mismas rutinas que se tenían antes de ser padres simplemente tendremos que adaptarnos un poco a ellos y a sus ritmos. Podemos salir a comer fuera, viajar, hacer deporte, conocer mundo, relajarnos en casa,… pero con algunos cambios y sabiendo que son niños y que es mejor adaptarnos nosotros a ellos que ellos a nosotros.
2- El peor enemigo de una madre es otra madre ¿por qué? ¿porque somos demasiado perfeccionistas? ¿porque tenemos un chip en el cerebro que nos incita a buscar la paja en el ojo ajeno? ¿porque nos dejamos intimidar por el qué dirán? vete tú a saber pero es cierto eso de que entre nosotras nos ponemos a caer de un burro a la mínima y que nos deja por los suelos que otra madre nos mire mal por cualquier aspecto de la crianza de nuestros hijos.
¿Cómo solucionarlo? Viviendo y dejando vivir y grabándonos a fuego en nuestras cabezas y repetirnos cada mañana el mantra “yo soy la mejor madre del mundo para mis hijos”
3- Jamás de los jamases hay que sentirse culpable por:
- Tener la casa desordena. Al que no le guste que no mire o… mejor aún, que coja una escoba y barra 😉
- La forma en que has decidido alimentar a tu bebé. Nada de radicalismos sobre tetas o biberones. Cada madre elige lo que es mejor para su familia y nadie debe hacerte dudar de tu elección. ¿Has elegido pecho? deja a un lado todos los comentarios maliciosos de si es ya muy mayor, no tienes leche suficiente, se queda con hambre,… ¿Has elegido biberón? No le estás dando la mejor alimentación, lo hacer por comodidad, eres menos madre,… No, no y no. Ninguno de esos comentarios son válidos para ti porque nadie sabe el por qué de tu elección y lo más importante… A NADIE LE IMPORTA.
- La forma en que tuviste a tu bebé. No se es menos madre por haber pasado por una cesárea ni eres más madre por haber dado a luz sin pedir ni siquiera la epidural. TODAS SOMOS MADRES
- Trabajar fuera o dentro de casa. ¿Para qué sentirse culpable por ello si de todas formas te van a criticar? Si te vas a trabajar fuera te dicen que los has dejado muy pronto y que antepones tu trabajo a tus hijos. Si te quedas en casa trabajando porque antepones tus hijos a tu profesión y les estás dando un mal ejemplo a las mujeres del futuro.
- Dedicarte un tiempo para ti misma. Como en los anteriores puntos, algunas lo necesitaran y otras no y por ello nadie será mejor madre que otra.
4- Los mayores miedos de las madres ante la maternidad son: (basado en las preguntas que l@s seguidores/as de Pintando una mamá han hecho por las rrss)
- Al post-parto. ¿Es normal sentir determinados dolores? Claro que sí, una acaba de parir y es un esfuerzo físico importante. Incluso se pueden tener agujetas así que sí, es normal y no hay por qué sufrir en silencio. Incluso es normal sentirse triste y decaída a ratos, eso de tener que estar feliz y radiante todo el día con tu bebé es de película o de “madre perfecta” que ya sabemos que no existe. Pero lo bueno es saber qué podemos hacer para no estar agotadas, ni tristes, ni con dolores… ¡¡Pedir ayuda!! Sí, muchas veces con un ratito de ayuda para que una puede disfrutar de su recién estrenada maternidad viene de perlas. Esa ayudita vendría a ser … ¿quién me he hecha una manita con la limpieza de la casa? ¿quién me trae algo de comida que me duela todo como para ponerme a cocinar?… y todo lo que se os pueda ocurrir.
- El sueño. Horario, lugar, forma de llevarlo a dormir,… siempre surgen miles de preguntas y hay miles de respuestas. Sí, tienen que dormir muchas horas pero hay bebés que duermen más y otros menos. No hay que obsesionarse, salvo que esté afectando la falta de sueño al desarrollo del bebé, claro. Si dormirlo en brazos, en la cuna o paseando en el cochecito… qué más da. Al principio, sobre todo, querrán hacerlo en los bracitos de mamá, cerca del pecho porque les hace sentirse más seguros. En serio, os aseguro que no se acostumbran y ya no bajaran de ahí nunca más. Mi pequeña con casi 5 años os aseguro que se duerme ella en su cama (o si me he despistado en el sofá) y sus primero meses sólo dormía en mis brazos. Y el tema recurrente por excelencia… COLECHO o NO COLECHO… nadie tienen la verdad absoluta y las dos opciones son buenas siempre y cuando no sea traumático para nadie de la familia. En mi caso, el colecho nos salvó y es de la forma en que hemos podido dormir toda la familia y estar descansados. Pero también conozco familias que compartir cama es todo un suplicio y los niños quieren mucho espacio y descansan mejor en sus camas (a las que van siempre sin llorar). Así que… vosotros elegís.
- La alimentación. Más o menos lo que hemos dicho antes pero ahora añadimos más posibilidades como es la tradicional de comenzar con triturados o el BLW que ahora todo el mundo conoce pero que yo no sabía que existía y que, sobre todo con la pequeña, yo ya practiqué. El mejor consejo para la alimentación de los hijos es el sentido común se use el método que se use. Si tu hijo te pide antes del año comer de vuestra comida… ¿por qué no darle? cocinando con poca sal y estando delante de él cuando come (por el tema de los atragantamientos) ¿por qué no? Mi mayor comió garbanzos antes del año y os aseguro que no le pasó nada malo por no esperar. Él nos veía comer y le apetecía probar y así lo hicimos.
- Las rabietas. La tan temible etapa de los dos años donde nuestros hijos se transforman y montan escándalos por cualquier motivo, a cualquier hora y en cualquier lugar. Las del primer hijo suelen ser las peores, todo nos afecta y los comentarios maliciosos (volvemos al punto 2) nos minan más nuestra moral pero… con el segundo, el tercero,… el tema se va relajando porque aprendemos sobre todo a evitar que comiencen descubriendo cuáles son los disparadores habituales y los evitamos hasta que llega el niño a tener la madurez suficiente para entender que eso no se hace así. Lo que viene a ser… TENER MUCHA PACIENCIA hasta que maduran y pasan la etapa. Además, intentar cambiarles la personalidad para que se adapte a nuestros ideales puede llegar a frustrarles.
- El juego. Muy beneficioso que fomenta la independencia, la autoestima, la creatividad y les ayuda a interiorizar las normas (sí con el juego también se aprende : ). Eso sí, hay que dedicarle tiempo y hay que estar con ellos. No vale eso de sentar a un bebé en la mantita de actividades, rodeado de juguetes y dejarle que se las apañe. Hay que estar con ellos, interactuar y ayudarles a lograr objetivos. La imitación es una poderosa “arma” para que nuestros hijos aprendan 😉
En resumen, la maternidad perfecta NO EXISTE, todos, absolutamente todos los padres pasan por momentos de crisis. Ninguna madre es tan perfecta y maravillosa como vemos en las películas. Ningún hijo es 100% perfecto que duerme bien, come bien, no llora, su caca huele a rosas y su pipi no se sale del pañal. Ni tampoco existen los niños que no tienen ninguna rabieta en sus 18 primeros años de vida, eso son cuentos chinos. En realidad lo que hacen esos padres de maternidades perfectas es callarse y no contar (como hacemos sobre todo las blogueras y blogueros 😛 ) todos esos percances.
Para finalizar, unas cuantas diapositivas que nos puso Lou, que nos muestran cómo es la mejor forma de tomarse la maternidad.
Espero que esta síntesis os haya gustado tanto como a mí la charla.