Cerquita de mamá: las claves del porteo

Por Maite Br.

Hace unos días me crucé haciendo las compras con una mami porteando a su bebé. ¡Me encanta ver a las madres que llevan a sus bebés cerquita de ellas, bien acurrucaditos! La cuestión es que, en esta ocasión, el sistema de porteo no era el adecuado y llevaba a su retoño bastante “colgón”.

Entonces me acordé de una exposición que hizo una muy buena amiga sobre el porteo, muy pero que muy interesante, que (con su permiso) voy a compartir con todas vosotras. Espero que os sea tan útil como a mí.

CERQUITA DE MAMÁ: Cómo y por qué del porteo de bebés. Nociones básicas para principiantes

Marina Romero Dorado

Diplomada Universitaria en Enfermería

El ser humano es un mamífero portador, o un “primate llevador”. Cuando nacen, sus crías no están preparadas para salir trotando tras su madre (como los caballos o ciervos), ni suelen ser varios cachorros en cada camada, para darse calor en el nido (como los conejos, gatos o perros). Estamos diseñados para ser llevados en brazos. Los bebés buscan la presencia de su madre para sentirse seguros y asegurarse que satisfacen sus necesidades. Son más felices cuando sienten el calor y la seguridad que les proporciona su madre.

Tradicionalmente, los seres humanos hemos llevado encima a nuestras crías, con diversos sistemas, según las condiciones y recursos de cada pueblo.Llevar al bebé encima es una antigua manera de las mujeres para cuidar a sus hijos y a la vez seguir trabajando en el campo o dentro de la casa. Esta tradición se ha ido perdiendo por la industrialización. El cochecito domina ahora como medio de transporte para los bebés. Sin embargo, el deseo de cargar con el bebé está en auge, porque los padres han redescubierto las ventajas de una crianza natural.

El portabebé debe estar diseñado para respetar la morfología específica del bebé, y también el confort del porteador. De ahí la importancia de conseguir la postura correcta del bebé, colocándolo de una manera confortable sobre el cuerpo del porteador, generalmente su madre.

Pero no todos los portabebés llevan al bebé en la postura correcta. Muchas mochilas llevan a los bebés “colgones”: los bebés van con las piernas colgando y apoyan todo su peso en sus genitales.

Un portabebés ideal es aquel que permite la postura ergonómica en un bebé: la postura ergonómica que debe llevar el bebé, es la llamada “Posición Ranita”, es decir, con las piernas en forma de “M”, con las rodillas más altas que las caderas. A pesar de parecer una postura forzada para las piernas del bebé, esta posición es beneficiosa para sus caderas. Llevando al bebé en postura “ranita” se asegura que la cabeza del fémur quede completamente encajada en el acetábulo (hueco de la articulación) de la cadera. Y además con el beneficio adicional de mantener al bebé “pegado” a la persona que lo porta, normalmente su madre o padre.

Pero también es importante la posición de la columna del bebé y tener una correcta sujeción de su cabeza; en ocasiones podemos oír que “es bueno que el bebé recién nacido vaya estirado en el carrito, después de estar tan estrecho nueve meses”. La realidad es más bien al contrario. Los bebes nacen con la columna vertebral curvada en forma de “C”. Un portabebés ergonómico respetará la cifosis natural de su espalda (la forma de “C”) y proporcionará un soporte adecuado para su espalda y cuello.

Pero además del confort del bebé, un portabebé ergonómico también respeta el cuerpo del porteador, repartiendo el peso transportado de una manera eficaz, lo que hace que puedan ser porteados prácticamente hasta que se desee, sin límite de edad o peso del bebé (o niño) transportado.

VENTAJAS DE LLEVAR A LOS BEBÉS EN CONTACTO PERMANENTE.

1. Los bebés se sienten más relajados y protegidos cerca de su madre, escuchando el latido del corazón, por lo que lloran menos. Además, son más independientes ya que sus necesidades han sido cubiertas con prontitud.

2. Los bebés portados duermen más horas durante el día, están menos nerviosos y les es más fácil conciliar el sueño.

3. Se reducen considerablemente los ataques de cólicos y flatulencias, el movimiento constante, el poder tener la tripita caliente y las posiciones verticales favorecen la expulsión de gases. Se favorece la digestión.

4. Se refuerza el vínculo mamá-bebé, mejorando la comunicación entre ambos. El contacto piel con piel genera endorfinas, el bebé es besado, tocado y acariciados muchas más veces si es portado que si va en un cochecito.

5. El bebé portado es amamantado con más frecuencia, al estar cerca del pecho lo puede agarrar más fácilmente y más veces, por ello la lactancia materna se ve gratamente favorecida.

6. Las mamás que portan a sus hijos tienen un sentimiento de libertad y autonomía mayor. El hecho de tener las manos libres y poder dedicarse a las tareas cotidianas, brinda la oportunidad de vivir la maternidad de forma mucho más relajada y placentera.

7. El niño ve el mundo desde nuestra altura, aprendiendo a socializarse con otroas personas, interviniendo en la vida cotidiana, interactuando desde muy pronto con su entorno.

8. Las mamás que portan a sus hijos sienten como día a día y con el aumento progresivo del peso de su bebé, su espalda, lumbares y los músculos abdominales se refuerzan, pues hacen un trabajo muscular diario.

CRITERIOS PARA ELEGIR UN BUEN PORTABEBÉ

A la hora de adquirir un nuevo portabebé, debemos vigilar que cumpla los siguientes requisitos:

• La posición del bebé es la correcta: piernas formando una M (en ranita, con las rodillas más altas que el culete) y espalda formando una C.

• Se puede ajustar al bebé de manera que quede bien pegado al cuerpo del porteador (al agacharnos, el bebé no se despega prácticamente del cuerpo).

• El bebé queda suficientemente alto (puedes darle un besito sin prácticamente agacharte) de manera que el peso se reparte bien sobre las caderas del porteador y no se carguen las lumbares.

• Las tiras de los hombros son anchas para que el peso se reparta bien.

• Las tiras de los hombros no se quedan cerca del cuello, sino que pueden colocarse encima de los hombros o entre el cuello y el hombro para que no se cargue la zona del cuello.

¿A la espalda, a la cadera, o delante?

Podemos distinguir tres partes del cuerpo de la madre en los que uno pueda atarse a un niño, siendo éstos:

• Delante: SIEMPRE barriga con barriga (o mirando a la madre, que queda más bonito!).

• Detrás: o a la espalda, siempre con el niño viendo la espalda de la madre, concretamente por encima de su hombro.

• Cadera: “Enganchado” a la cadera de la madre, que es probablemente la posición que permite mayor campo de visión para el niño.

CLASIFICACIÓN DE PORTABEBÉS.

Podemos hacer una clasificación de portabebés, según repartan el peso en uno de los hombros del porteador, o en los dos:

• En un hombro:

– Bandolera.

– Pouch.

• En dos hombros:

– Fular.

– Mei-tai.

– Mochila Ergonómica.

BANDOLERA

La Bandolera, probablemente el portabebés más extendido del mundo, ya que en todas las culturas, las mujeres han utilizado las telas que tenían más disponibles para portar a sus bebés. Una bandolera es un rectángulo de tela, de aproximadamente 70 cm. de ancho y de largo variable, según la estatura del porteador, pero lo suficiente para rodear el cuerpo del porteador y hacer una “bolsa” en la que se coloca al bebé o niño.

La Bandolera de Anillas es similar, pero en uno de sus extremos lleva cosidas un par de anillas como método de ajuste del portabebé, y el propio peso de éste hace que las anillas queden cerradas y seguras. Esto permite ajustar la medida a las necesidades de cada momento.

En la bandolera se puede colocar al bebé acostado o erguido, delante del porteador, a su espalda o a la cadera. Por ello se puede usar desde el nacimiento del bebé hasta que el niño ya es mayorcito.

El peso se reparte por la espalda y un sólo hombro. Existen bandoleras de diferentes tejidos y modelos (gruesos, ligeros, para baño, con tela de algodón, de tela de fular…).

Ventajas:

• Es muy sencilla de utilizar e ideal para favorecer la lactancia de una manera cómoda y discreta.

• Es de uso muy sencillo también para recién nacidos, en posición tumbada (que, aunque no es la óptima para transportar a un recién nacido, puede ser muy interesante para favorecer la lactancia). Permite también llevarle en posición erguida sobre el pecho del portador.

• Permite ajustar la tela perfectamente alrededor del cuerpo del bebé y porteador, de manera que el peso se reparta uniformemente y el niño quede correctamente sujeto.

• Ocupa poco espacio una vez doblada.

• Es relativamente barata en comparación con otros portabebés.

Inconvenientes:

• Debido a que el peso recae en su mayor parte sobre un sólo hombro, es necesario ajustar la tela cuidadosamente para asegurar la máxima comodidad al porteador.

• Asimismo, si se comienza a usar con niños ya mayorcitos, podemos notar algo de incomodidad muscular o cansancio los primeros días, por la falta de costumbre (cosa que no ocurre cuando lo hemos llevado desde pequeños).

• Es necesario practicar un poco para aprender a ajustar las anillas.

POUCH

Es muy similar a la bandolera, con la diferencia de que no lleva anillas, es sencillamente una tela cosida en forma de tubo que se ajusta a la posición deseada. Por ello es necesario seleccionar la talla correcta para el portador. Permite las mismas posiciones que la bandolera, pudiéndose usar también desde el nacimiento.

Ventajas:

• Ocupa poquísimo espacio, es ideal, por ejemplo, para llevar en el bolso. Es el portabebé más rápido de poner y quitar.

• Hay una gran variedad de estampados.

• Puede ser muy adecuado para trayectos cortos, o para cuando el niño nos pide brazos pero enseguida quiere volver al suelo.

• Muy sencillo de utilizar.

Inconvenientes:

• Debido al tallaje, puede ser necesario tener dos pouches diferentes en caso de que padre y madre (u otras personas que quieran llevar al bebé) usen distinta talla.

• Si nos queda demasiado grande, el bebé irá menos sujeto y más abajo, y, por el contrario, si nos queda más pequeño, el niño irá más arriba y puede ser que cuando crezca no sea sencillo colocarle en el pouch. Las peculiaridades de este portabebé hacen que no sea posible ajustar la tela.

FULAR

Se trata de una larga pieza de tela que sirve para ajustar al bebé a la posición deseada mediante diferentes nudos.

Usualmente, la tela mide de 70 a 80cm aproximadamente de ancho, y su longitud suele oscilar entre los 2,30m y los 5m.

Es el portabebé más versátil debido al gran número de posiciones que permite. Existen diferentes medidas de tela, dependiendo de las posiciones que se deseen utilizar: con un fular largo pueden realizarse todos los nudos; un fular corto puede adaptarse a nuestros nudos preferidos y evitar un exceso de tela que puede resultar incómodo.

Los Fulares Elásticos están hechos de tela elástica muy fácil de ajustar y muy cómodo para el bebé y portador. Permite realizar primero el anudado y después colocar el bebé, como el Bambuleo. Algunos, ya vienen anudados con anillas que permiten colocar directamente al bebé (como la Mochila Fular Close Baby Carrier). Otras marcas son Hoppediz, Boba Wrap.

Tan agradable como llevar al bebé dentro de la camiseta. Es una buena opción para los primeros meses del bebé y bebés prematuros.

Todas hacen un buen papel con niños recién nacidos, y el peso suele ser hasta los 15 kilos del bebé.

Los Fulares Tejidos (Fulares No Elásticos) son confeccionados con una tela fabricada especialmente para llevar al bebé. La tela adecuada en fulares no elásticos es aquella que cede solamente en sentido diagonal, sin ceder de manera transversal o vertical. Se pueden encontrar diferentes calidades y tipos de tela (algodón, lino, con mezcla de cáñamo…). Su longitud ideal depende de la complexión del portador, así como de la edad y del peso del niño.

Su principal inconveniente es que resulta necesario un proceso de aprendizaje para usarlo correctamente, ya que existen muchas posibilidades diferentes de porteo y anudados, y puede resultar complicado e incomodo de colocar. Pero una vez que se tiene la destreza suficiente, es el portabebés más adecuado, tanto para el bebé como para el porteador, porque es el que mejor reparte el peso, y permite mantener la postura correcta con más comodidad.

Se utilizan desde el nacimiento hasta que padres e hijos quieran ya que no hay límite de peso.

Algunos de los fulares tejidos son: Didymos, Hoppediz, Neobulle, Pinjarro, Colimaçon… Cada marca suele tener varios tipos de tejido, y cada tejido tiene unas cualidades: de soporte (100% algodón. Aunque normalmente, los que más soportan son mezclas, por lo que son mas toscos y necesitan doma), frescura (como el lino), suavidad (como el bambú, pero soporta poco)…

Ventajas:

• Como ya hemos señalado, es el portabebés más versátil, permite infinidad de posiciones que pueden adaptarse tanto a la situación como al crecimiento del bebé.

• La sujeción es óptima con un poco de práctica.

• El cuerpo del bebé va perfectamente pegado al del porteador, garantizando una correcta sujeción.

• Existen diferentes medidas y calidades de tela, lo que permite adaptarse a las necesidades personales de cada familia.

Inconvenientes:

• Es necesario practicar las diferentes posiciones para adquirir soltura.

• El hecho de que sea una tela de gran longitud, así como el tema del anudado, puede hacer que no resulte atractivo para algunas personas, que prefieran otros medios de ajuste.

• Los fulares elásticos no están recomendados para bebés y niños de un cierto peso, prefiriéndose en ese caso los no elásticos, aunque pueden ser realmente confortables también.

MEI-TAI

Se trata de un portabebé asiático. Es similar a una mochila, pero su ajuste se realiza mediante nudos sencillos. Se trata de un rectángulo de tela con cuatro tirantes, dos de ellos para anudar a la cintura y dos más para sujetar la parte superior. Dichos tirantes pueden ir acolchados, así como la parte superior de la tela, donde el niño apoya la cabecita. Algunos incorporan un reposacabezas, o capucha, para sujetar la cabeza del bebé cuando este se duerme. Normalmente, es más confortable de usar que los portabebés de un sólo hombro, pero puede resultar engorroso por la longitud de las tiras.

Se recomienda a partir de los 4 o 6 meses, según el desarrollo del bebé, hasta aproximadamente los 3-4 años de edad.

Permite posición delante, a la espalda y a la cadera, con diferentes variaciones. El peso se reparte entre las caderas y hombros del porteador.

Existen variantes del mei-tai, como el mei-hip o el podaegi (portabebé tradicional coreano).

Ventajas:

• Al estar el peso bien repartido, permite usarlo durante trayectos largos.

• Puede usarse desde el nacimiento hasta con niños mayorcitos, aproximadamente los 4 años de edad. Aunque la edad ideal para comenzar a usarlo con el bebé es a partir de los 5-6 meses, cuando pueden llevar sus piernas por fuera del mei-tai sin que el ángulo de apertura sea excesivo.

• En general, es posible que haya padres que acepten mejor estos portabebés tipo “mochila” antes que las piezas de tela, aunque por supuesto hay de todo.

Inconvenientes:

• El tema de los nudos, aunque sencillos, puede restarle atractivo. Hay personas que prefieren otros sistemas de ajuste.

• El recién nacido deberá llevar sus piernas por dentro de la tela (en M) y proporcionarle una sujeción extra a su cabecita. Esta no es la postura óptima para llevar a un recién nacido, aunque deberemos decir que, fisiológica y afectivamente, siempre será más beneficioso llevar a un recién nacido en un mei tai convencional que en un carrito, completamente estirado.

MOCHILA ERGONÓMICA

Manduca Marsupi plus Ergo baby Patapum

Las mochilas ergonómicas son aquellas que respetan la fisiología natural del bebé, permitiéndole mantener las piernas en “M” y la curvatura de la espalda. Resultan fáciles de colocar por sus cierres.

Se recomiendo su uso a partir de los 5 o 6 meses, para no forzar una apertura excesiva se las caderas, si bien, podría utilizarse con un reductor, ya incorporado en algunas mochilas.

Mochilas de este tipo son, por ejemplo, las mochilas Beco Carrier, Ergo Baby, Manduca, Marsupi Plus, Patapum… Permiten transportar con comodidad al niño desde el nacimiento hasta los 15 Kg. de peso, y muchas de ellas incluso más. Además de su uso en paseos, tareas en casa, también pueden utilizarse en salidas al monte, excursiones y demás, garantizando la correcta sujeción del bebé y el máximo confort, tanto para él como para el porteador, ya que reparte el peso del bebé entre hombros y caderas de la persona que lo lleva. Algunas permiten las posiciones delante, a la espalda y a la cadera.

Ventajas:

• Los portabebés tipo mochila, son las que pueden usarse durante más tiempo, desde el nacimiento hasta alrededor de los 20 Kg.

• Muy cómodas y fáciles de colocar, suelen llevar bolsillo incorporado, así como una capucha para sostener la cabecita del niño si se duerme.

• El niño va colocado en la posición fisiológica, sentado y no colgado, con el peso de su cuerpo sobre sus nalgas, en vez de sobre sus genitales (como ocurre en el caso de otras mochilas más “comerciales”, como BabyBjörn, Bebé Confort, Jané, Graco…).

• Para cuando los niños comienzan a andar y requieren estar subiendo y bajando del portabebé repetidamente, son muy cómodas de llevar.

• También son muy aconsejables para la montaña, ya que a diferencia de las mochilas de montaña convencionales, son mucho más ligeras y garantizan la posición adecuada del niño, así como la comodidad y ergonomía para el portador.

• Son los portabebés mejor aceptados por los padres, al considerarlos “más masculinos”.

Inconvenientes:

• No es el portabebé más barato, pero dado lo extensivo de su uso, podemos decir que el precio se ve sobradamente amortizado.

• Para bebés muy pequeños o recién nacidos, es recomendable usar un reductor (incorporado en el caso de la Manduca) o un cojín o mantita doblada, aunque la postura óptima será a partir de los 5-6 meses, cuando se lleve con las piernas por fuera de la mochila. También existen otras, como la Marsupi Plus, en las que la zona sobre la que va sentado el bebé puede reducirse y puede usarse con recién nacidos, ya que no exige entonces una apertura de piernas excesiva para sus pequeños cuerpecitos.

• Comparados con otros, es un portabebé que ocupa bastante espacio mientras no se utiliza.

DIFERENCIAS PRINCIPALES ENTRE ESTOS PORTABEBÉS Y LOS CONVENCIONALES OFRECIDOS POR DIVERSAS MARCAS DE PUERICULTURA

Numerosos fabricantes de productos de puericultura ofertan mochilas portabebés de nueva generación, supuestamente “ergonómicas”.

La diferencia entre estas mochilas “comerciales” y las realmente ergonómicas radica en la postura que adopta el bebé en ellas: en las mochilas comerciales, el bebé cuelga literalmente, descargando todo el peso de su cuerpo sobre la zona genital (en vez de sobre su culito) y sin proporcionar el apoyo necesario a sus caderas. Aparte de que suelen ser muy incomodas para el porteador y su uso se limita a los primeros meses del bebé.

INCORRECTO CORRECTO

Además, en las fotografías promocionales de este tipo de mochilas más comerciales suele aparecer el niño mirando hacia delante, es decir, su espalda contra el pecho del porteador. Esta postura está totalmente contraindicada, puesto que, una vez más, no respeta la posición correcta de la espalda y cadera del bebé, forzando su columna y obligándola a ir completamente recta (sin poder adoptar la forma correcta, en forma de “C”). De la misma forma, se expone al bebé a estímulos directos, sin posibilidad de refugiarse, ya que no pueden girarse.

Igualmente, ocasiona incomodidad para el porteador, ya que el bebé tiende por la forma de su columna a separar su cuerpo de quien lo lleva, lo que desplaza el eje de gravedad de este último, obligándole a modificar su postura correcta con las consiguientes molestias de hombros y espalda y sobrecarga del suelo pélvico.

La única “ventaja” de este tipo de portabebés es que son más fáciles de encontrar en cualquier tienda de puericultura.

¿QUÉ PORTABEBÉS ES MÁS ADECUADO PARA MI NIÑO?

Los primeros meses (0-4 meses): En esta etapa los portabebés más recomendables son: el fular y la bandolera.

El bebé sujeta la cabeza (4-8 meses): Durante esta etapa podemos continuar utilizando el fular elástico, fular tejido y bandolera.

Podemos valorar empezar a utilizar una mochila ergonómica que será adecuada o no según la fase de desarrollo de cada bebé en concreto.

El bebé se sienta solo, gatea, camina, etc. (9-24 meses): Cuando el bebé sujeta bien la cabeza, es capaz de sentarse sólo y pesa alrededor de 7,5kg podemos empezar a utilizar todo tipo de portabebés: La mochila ergonómica, el mei tai, el fular (si antes no hemos utilizado fular, a partir de esta edad se recomienda utilizar directamente un fular tejido).

Y como portabebés complementarios, el fular elástico y la bandolera.

El Niños mayores (más de 2 años): Para papás experimentados y niños pacientes, el fular será una excelente opción.

Como complementarios, la bandolera y el mei tai son opciones muy prácticas. A esta edad la opción más cómoda es llevar el bebé a la espalda. Si es la primera vez que se utiliza un portabebés, es recomendable empezar a esta edad con una mochila ergonómica.

Tabla resumen de los portabebés más recomendados en cada edad del bebé

	FULAR ELASTICO	FULAR TEJIDO	BANDOLERA	POUCH	MEI TAI	MOCHILA ERGONÓMICA
0-4 meses	Excelente	Excelente	Excelente	Inadecuado	Inadecuado	Inadecuado
4 a 6-9 meses	Excelente	Excelente	Bueno	Aceptable	Aceptable	Aceptable
6-9 a 14 meses	Bueno	Excelente	Aceptable	Aceptable	Excelente	Excelente
+14 meses	Aceptable	Bueno	Aceptable	Aceptable	Excelente	Excelente