Querido Diario… estamos llegando al final de otro año más y toca hacer balance. Guardar, en la que será mi quinta maleta, todos los recuerdos vividos en este 2014. En una maleta porque una caja se queda pequeña. Antes de mi entrada en el gran club que es la maternidad, mis momentazos de todo un año cabían en una caja no más grande que una de zapatos. Con la llegada del mayor me di cuenta que tenía que atesorar cada día de su vida. Su primera mirada, su primera sonrisa,… todas sus primeras veces. Los baños y chapoteos, su carita de angelito mientras dormía, suSigue leyendo...