Historia de una niña APLV (2)
La semana pasado comenzaba la historia de una niña APLV hablándoos de cómo descubrimos que nuestra pequeña tenía alergia a la proteína de la leche y la ternera. Hoy continuamos con ella y de cómo este diagnóstico alteró nuestras rutinas. Una vez confirmada la alergia comenzamos con los cambios en nuestros hábitos diarios. Revisamos el etiquetado de todos los alimentos que teníamos en casa descartando los que tuvieran leche o trazas de leche. ¡¡¡Increíble la cantidad de alimentos que pueden llevarla!!! En muchas ocasiones alucinábamos al comprobar qué cosas podían contener leche. Pan de molde, embutidos, prácticamente todas las galletas, pescado congelado, bolsas de patatas,…Sigue leyendo…