Una mamá en la sala de espera
El jueves nos daban la noticia. Si todo iba bien, el lunes a las 8:00h nuestra pequeña entraría a quirófano: extirpación de unas anginas de grado IV, vegetaciones y drenajes transtimpánicos. Pues el día llegó. Opté por no contarle nada a ella y hacer como si fuera una visita más al médico. Cenó pronto y la acosté vestida. Tenía que ir sin comer ni beber nada desde las 00:00h, asique por la mañana solo fue cogerla en brazos y subirla al coche. Mamá fue otra cosa. Tantas vueltas me daba la cabeza que apuntito estuve de irme al salón y esperar despierta esas horas queSigue leyendo…