Después de faltar la semana pasada a este fantástico carnaval que inició Trimadre, vuelvo con fuerzas renovadas. Hay ocasiones en las que hay que decir basta, parar e incluso dar un pasito hacia atrás para tener una nueva perspectiva y volver a avanzar con mucha más energía y, sobre todo, frescura porque notaba que me estaba metiendo en un círculo vicioso y de muy poca creatividad.
Y pensaréis que con la palabra que traigo no parezca que haya salido de ese hoyo pero sí, lo que pasa que no la había propuesto antes porque quería explicarla bien y hoy creo que podré.
ANGUSTIA, no supe lo que era tener verdadera angustia hasta que fui madre. Desde ese mismo instante, en mi día a día, siempre hay un momento en el que paso mucha angustia. Aparece de la nada y de manera totalmente involuntaria y durante un rato me quedo acongojada.
Según el RAE:
(Del lat. angustĭa ‘angostura’, ‘dificultad’).
1. f. Aflicción, congoja, ansiedad.
2. f. Temor opresivo sin causa precisa.
3. f. Aprieto, situación apurada.
4. f. Sofoco, sensación de opresión en la región torácica o abdominal.
5. f. Dolor o sufrimiento.
6. f. náuseas (‖ gana de vomitar). U. solo en sing.
7. f. p. us. Estrechez del lugar o del tiempo.
La 6ª definición, por desgracia, la padecí en los dos embarazos, y es que lo vomité todo durante las primeras 18 semanas y la sensación de angustia era desde la mañana hasta la noche. 🙁
Pero yo vengo a hablaros sobre todo de la 2ª. La angustia que padezco todos los días desde que nació el mayor es ese temor a algo que aún no ha pasado pero que tienes la sensación de que va a pasar.
Soy muy imaginativa y, hasta en las situaciones más inocentes, de repente llega esa angustia por el qué pasaría si cayeran en mala postura al suelo mientras juegan en el parque, o sí pasaran muy cerca del columpio y se dieran un golpe,… Pero lo que realmente llevo peor es cuando la angustia aparece por la noche, me llega a desvelar y todo, y es que me da por pensar en que a lo mejor me van a necesitar en mitad de la noche y me obsesiono con que no me voy a enterar y ya no puedo dormir.
Y es como en la definición, no hay una causa precisa para ese temor es… una aflicción, congoja o ansiedad (1ª definición) a perderlos, a no volver a sentirlos en mis brazos, a no volver a verlos, llegando a tener hasta sofocos y sensación de opresión en el pecho (4ª definición), y en ese instante siento todo el dolor y sufrimiento (5ª definición) que pasaría si les llegara a suceder algo.
Os puedo asegurar que la angustia que había sentido antes de convertirme en mamá no era nada comparado con la de ahora y… esto creo que será ya por lo que me resta de vida 😉
Ay nena… gracias porque le pusiste nombre y palabras a lo que siento desde hace dos años cuando me enteré que estaba embarazada. Nunca lo comparto con nadie por temor a que me tilden de tremendista o pájaro de mal agüero. Pero es tal cual lo describís en cualquier momento del día me puede acosar la angustia, hasta en los momentos más felices y ya dejan de ser plenamente felices… ¿Será que a todas les pasa y es un mal de la maternidad? ¿O somos sólo nosotras?
Un beso grande. Magnífica entrada… que bueno que hayas vuelto… te extrañamos!!!
Es verdad… No hay angustia comparable a la que se siente cuando nos convertimos en madres. Y dicen que va a peor, que nunca se va del todo… Yo, al igual que tú, soy de imaginación calenturienta… y muy masoquista psicológicamente. No puedes hacerte una idea de la cantidad de barbaridades que soy capaz de recrear en mi cabezaaaaa. Ayyyyyy. Pero esto no puede ser! Hay que pararlo! Joooo.
Un beso y bienvenida de nuevo, preciosa.
Uf, yo también me angustio una barbaridad pensando en lo que les puede pasar, imaginando lo que les puede suceder cuando no están a mi lado, y elucubrando posibles peligros cuando sí están (y si resbala, cae del sofá y se desnuca, o aterriza sobre el borde afilado de ese juguete, se le perfora la carótida, y…) mi marido se ríe de mí, y dice que me monto unas películas… Él no me comprende, pero creo que tú sí!
Un beso:-)
Me angustia pensarlo…. es una angustia, jajaja
¡Qué mala es la angustia! Espero que pronto puedas superar la.
Yo siempre digo que desde el momento en el que te quedas embarazada hasta que te vayas de este mundo sentiremos como madres muuuuchas angustias!!!!!
Uf, tan cierto!!! Nunca hubiéramos podido sentir una angustia parecida a la que ahora sentimos, porque nunca nadie había sido tan importante, tan espectacularmente vital para nosotras, como hoy son nuestros hijos.
Mientras esa angustia no nos paralice o nos controle, que nos sirva para mantenernos alertas y pendientes de ellos…
Te mando mil besos 😉
Angustia está muy relacionado con lo que he escrito y en mi post de hoy también, es otra de las sensaciones que siento cuando me separo de mi niño. Yo creo que esta sensación está totalmente unida al hecho de ser madres…. La sufrimos desde el momento que damos positivo el test.
Un abrazo gordo!!
Uff, ya lo puedes decir, angustia constante porque no le pase nada a ella, porque no me pase nada a mi y se quede sola, me lo dijeron estando embarazada, cuando le dije a una amiga que tenía miedo a que el bebé no estuviera bien “y desde ahora vas a tener miedo siempre” y madre mia ¡¡que razón!!
No es nada útil que te diga que no sirve de nada la angustia salvo para darte malos momentos a ti. Pero es muy fácil decirlo y sé que controlarlo no es sencillo, por no decir imposible. Tampoco deberías ser como nosotros, que somos unos viva la vida que a veces pienso que me van a denunciar y a quitar la custodia, jajaja. En el justo medio está la virtud: a ver si yo te paso un poco a ti y tú un poco a mí y nos quedamos sanas y equilibradas 😉 Pero vamos, entiendo perfectamente lo que te pasa y que es normal que eso le ocurra a muchas mujeres.
Mucho ánimo para llevarlo de la mejor manera posible. ¡Un abrazo grande!
¡Qué cantidad de desvelos! Y yo también soy muy de imaginar çómo se van a desarrollar las situaciones de la peor forma posible y me da por predecir desgracias antes de que ocurra ¡y eso que a veces no llegan a ocurrir nunca! La llegada de la bichilla acabará por volverme loca del todo con tantos temores.
Otra más que se suma al club de las madres angustiadas…me pasa exactamente lo mismo, tanto que en ocasiones el miedo me paraliza y un miedo a nada, porque en realidad no ha ocurrido nada (gracias a Dios). Pero he de reconocer que es algo contra lo que estoy luchando. Desde hace un tiempo cada vez que me viene un pensamiento de esos a la cabeza inmediatamente intento pensar en algo positivo, y me va funcionando…un poco por lo menos jejejej
yo tengo una angustia constante a que le pase algo, se me pasan por la cabeza imágentes horribles que rápidamente deshecho, pero no puedo evitar angustiarme….. pero también tengo angustia de que me pase algo y que se quede sin su mamá…. procuro quitar estos pensamientos siempre de mi cabeza, así vienen y así se van…. pero me da rabia solo de pensarlo….
Besos!!!!!!
Te entiendo perfectamente. El otro día hablando con Anya (perdida en Sebastopol), hablábamos de eso, veo peligros en todos loa sitios, todo lo que oigo que ha pasado ya pienso que le puede pasar a los míos también. Y también a veces, en mitad de la noche, me he despertado con falta de aira, con esa angustia y ese agobio de que si pasara algo, yo me moriría, seguro. El amor por los hijos es taaaaan grande que nos hace sufrir un montón (a veces, otras veces nos hace ser las personas mas felices!!!)
Totalmente de acuerdo con que la angustia que tenemos ahora es completamente distinta a la que sentíamos cuando eramos nosotras mismas las que nos podíamos en “peligro”. Ahora hay que estar con mil ojos a todo lo que hacen.