Muchas veces pecamos de irnos a conocer lugares lejanos y olvidarnos de lo que tenemos cerca nuestro. Visitamos ciudades de otras comunidades o países pero desconocemos las poblaciones que tenemos a pocos kilómetros. A nosotros nos pasa y hemos decidido poner remedio a ello. Los fines de semana que podamos, vamos a recorrer los pueblos y ciudades de la provincia de Alicante. Ya hemos empezado y la primera visita ha sido a… ALCOY.
¿Por qué Alcoy?
Porque han celebrado por primera vez su Fira Modernista y a nosotros todas esas ferias nos gustan mucho (a las medievales vamos siempre que tenemos ocasión)
Nos gustan porque…
- es una manera de que los niños aprendan historia sin tener que leerla en un libro. Se sumergen en ella y, si uno se caracteriza, incluso la viven.
- es una forma de alejarnos de las nuevas tecnologías y aprender que se puede vivir sin ellas.
- es otra forma de pasar tiempo en familia.
Solemos hacer nuestras visitas por nuestra cuenta. En esta ocasión, fuimos a Alcoy invitados al blogtrip que se celebró con motivo de la feria y organizado por Quality Tours Mariola junto a la Tourist Info Alcoy y la Asociación Alicante Interior. Pero, lo que hicimos en el blogtrip perfectamente podéis hacerlo vosotros si os apetece conocer Alcoy. Los edificios están a simple vista y sólo hay que fijarse un poco para descubrir muchos de ellos. Y, la Fira Modernista, tienen intención de celebrarla todos los años.
Nuestro paso por Alcoy
¿Dónde dejar el coche?
Lo primero, encontrar aparcamiento para dejar el coche durante todo el día. Lo ideal es buscar uno gratuito y hay dos posibilidades cerca del centro histórico. En la calle Pintor Casanova, Cruce con la calle Sant Blai (es un descampado asfaltado) y por la zona del Viaducto.
Nosotros escogimos la primera opción y llegamos sin ningún problema hasta ella. Y a escasos 100 metros teníamos la Tourist Info.
¿Dónde comenzar la visita a la ciudad?
Por supuesto, en la Tourist Info. Lo mejor es pasarse por la oficina de turismo de la localidad cada vez que se vaya a visitar una ciudad. De esa forma, siempre tendremos planos de la ciudad a visitar donde vengan marcados los edificios y monumentos más importantes (y que no hay que perderse) y las rutas que se pueden seguir.
En Alcoy hay tres importantes. La modernista, la de la indumentaria y la del vermut (esta creo que es muy visitada 😛 )
Nuestra visita a Alcoy
Nosotros hicimos la modernista, lógicamente. Impresionante. Como nos dijo Gaby (el guía que nos acompañó) los edificios de la época muy parecidos a los de Barcelona porque los artistas estudiaron allí.
Los artistas alicantinos estudiaban en Madrid y los de Alcoy en Barcelona, de ahí las diferencia de influencias entre una y otra ciudad.
Tuvimos la oportunidad de entrar a ver por dentro el Círculo Industrial y nos quedamos impresionados con sus pinturas.
Mientras seguíamos las explicaciones de nuestro guía, nos cruzamos con una manifestación sufragista organizada por la Asociación de Amas de Casa. La participación fue muy numerosa y ellas estuvieron muy volcadas en la lucha.
La ruta de los edificios la hicimos en dos partes (por la mañana y después de comer y es lo mejor si se lleva niños) y, antes de comer, quienes quisieron, hicieron un tramo de la ruta del vermut. Nosotros también 😛
En esa ruta, podías conseguir los tres vasos de la colección que hay. ¿Cómo conseguirlo? Había que buscar el bar que tuviera un barril rojo y pedir un vermut. Si pagabas un euro más te llevabas el vaso a casa. Nosotros tenemos 2 😛 y el vermut muy rico 😛
¿Dónde comer?
Si después de hacer la ruta del vermut (te dan una tapa con cada vaso) aún se tiene hambre, hay una buena selección de restaurantes donde comer. Incluso, en alguna Fila de Moros y/o Cristianos se puede si se llama, previamente, para hacer la reserva.
Nosotros comimos en el Hostal Savoy su menú modernista (los precios de los menús rondan los 20 euros más o menos). No nos quedamos con hambre. Las raciones generosas para compartir y los platos principales igual de buenos de lo que parecían. Yo no probé todo lo que pusieron por mi alergia pero las alternativas con la misma presencia e igual de ricas que los platos originales.
La fachada no hace justicia al interior así que si vais, no os echéis atrás si no os llama la atención el exterior. Además, al ser hostal, uno puede quedarse a dormir allí y el precio por noche no es caro y las habitaciones se ven muy bonitas y limpias.
Para los niños también había menú modernista. Entrantes en el centro de la mesa para compartir y plato a elegir entre hamburguesa con ensalada y arroz. Mis hijos comieron el arroz y dijeron que estaba muy rico.
Luego… durante la sobremesa vino una monitora a llevarse a los niños a una sala de juegos donde hacer manualidades o saltar en un castillo hinchable, por ejemplo. No había manera de sacarles de allí.
La Fira Modernista de Alcoy
Se ha acabado ya pero se repetirá el año que viene y el siguiente y el siguiente 😛 Y no os la podéis perder. Ha sido como hacer un viaje en el tiempo y pasar un día en el pasado. Los alcoyanos, muy volcados en su feria, se vistieron de época. Los escaparates volvieron a principios del siglo XX junto a sus dueños. Se respiraba otro ambiente.
Cada año, va a estar dedicada a algún personaje relevante de la ciudad. Este año fue el turno para el arquitecto Vicente Pascual. Hubo una feria de la época en el parque La Glorieta (parque típico modernista por su forma circular, su estanque en el centro, el quiosco y la presencia de animales- vía Gaby) donde pudimos ver máquinas de la época, comprar accesorios de moda y repostería casera, entre otras cosas.
Se organizó una manifestación sufragista (os lo he dicho más arriba) y una boda modernista entre otros actos y, para los niños, hubo juegos de la época y talleres.
Como veis, no faltó de nada durante toda la semana. Para mis hijos fue toda una experiencia de la que aprendieron mucho sobre la forma de vivir de sus bisabuelos. Seguro que cuando estudien en el colegio el tema recordarán todo lo visto y vivido.
Otros días especiales en Alcoy
Marcaría otros dos en el calendario además de la Fira Modernista. Su cabalgata de Reyes Magos y su fiesta de Moros y Cristianos. No he ido aún a ninguna de ellas pero no ha sido por ganas. Espero no tardar en ir porque todo lo que he oído son maravillas. Y es que, Alcoy tiene mucho que ofrecer 😛
¿Conocéis Alcoy? ¿Os animáis a venir?
¡Customizaron hasta los carritos de bebé! Me encantó cuando te lo vi en Instagram, pero a mí me hubiera dado antojazo de vestirme igual que ellos.
A mí me dio un superantojazo. Tanto que ya estoy pensando en volver el año que viene y esta vez vestida. Los alcoyanos lo dieron todo y transportaron al pasado todo. Camareros, curas, enfermeras, bomberos, escaparates… merece la pena ir
Me han entrado muchas ganas de ir! A ver si el año que viene podemos y además vestidos de la época. 😀
Esa es mi intención, volver y vestida de época. Nos tendremos que organizar, verdad??